El decano de ingenierosVA explica en la Cadena SER cómo se producen las explosiones de gas

El decano de ingenierosVA explica en la Cadena SER cómo se producen las explosiones de gas

Valladolid ha registrado en menos de un mes dos explosiones de gas en viviendas que han provocado el fallecimiento de una persona y varios heridos, además de graves desperfectos en el hogar de decenas de familias. Ante la alarma que han levantado estos dos sucesos sobre el uso y el mantenimiento de los suministros de gas, el programa Hora 14 de la Cadena SER Valladolid ha preguntado a ingenierosVA por los motivos que pueden llegar a provocar una explosión de este tipo. 

Tal y cómo ha explicado el decano, Rafael Álvarez, “para que se produzca una explosión de gas deben ocurrir dos cosas: la primera, tenemos que tener una fuga de gas en el interior de la vivienda; y la segunda, una chispa que provoque la ignición con la correspondiente explosión”.  

La probabilidad de que se produzca una fuga de gas en una vivienda puede variar significativamente según diversos factores, como el tipo de sistema de gas utilizado, la calidad de la instalación y mantenimiento, la ubicación geográfica y las condiciones generales de seguridad. 

Sin embargo, las chispas eléctricas se producen de forma “muy frecuente” en nuestros hogares, según ha comentado el decano de ingenierosVA, “simplemente al encender el interruptor de la luz” de cualquier habitación o al utilizar un electrodoméstico. 

 

¿Qué podemos hacer para prevenir una explosión de gas en nuestra vivienda? 

Teniendo en cuenta estos aspectos, es importante que tomemos las precauciones adecuadas, principalmente realizar inspecciones regulares, mantener una instalación en buenas condiciones y contar con detectores de gas para reducir el riesgo de cualquier posible fuga. 

Estas son algunas medidas que podemos tomar para reducir el riesgo de una explosión de gas: 

  1. Asegúrate de que la instalación del sistema de gas en tu vivienda haya sido realizada por profesionales certificados y cumpla con las normativas de seguridad. 
  2. Realiza inspecciones regulares de tus sistemas de gas, incluyendo tuberías, conexiones y aparatos. Busca signos de corrosión, fugas o cualquier otro problema. 
  3. Mantén tus sistemas y equipos de gas en buen estado a través de un mantenimiento regular. Esto puede incluir la limpieza, ajustes y reemplazo de partes desgastadas. 
  4. Instala detectores de gas en áreas clave de tu vivienda, como cerca de la cocina y los calentadores de agua. Estos dispositivos pueden detectar fugas de gas y emitir una alarma audible. 
  5. Asegúrate de que tu vivienda esté bien ventilada, especialmente en áreas donde se utiliza gas, como la cocina. La ventilación adecuada ayuda a dispersar cualquier acumulación de gas. 
  6. Apaga los aparatos de gas cuando no los estés usando, especialmente antes de irte de casa. 
  7. Asegúrate de que las salidas de aire para los aparatos de gas estén despejadas y no bloqueadas por objetos. 
  8. Evita almacenar sustancias inflamables cerca de los aparatos de gas, ya que podrían aumentar el riesgo en caso de una fuga. 
  9. Enseña a todos los miembros de tu familia sobre los peligros del gas y cómo actuar en caso de detectar una fuga. 
  10. Asegúrate de saber dónde se encuentra la válvula principal de gas en tu vivienda y cómo cerrarla en caso de emergencia. 
  11. Si hueles a gas (un olor similar a huevos podridos), ventila inmediatamente el área abriendo ventanas y puertas. No enciendas ningún interruptor eléctrico, no uses fósforos ni encendedores y no hagas nada que pueda crear una chispa. Sal de la vivienda y llama a los servicios de emergencia o al proveedor de gas desde un lugar seguro. 

 

Aquí puedes escuchar la intervención del decano en la Cadena SER: