

ingenieros VA ha reafirmado su compromiso con la responsabilidad social a través de una donación de 2.500 euros a UNICEF, destinados a promover y defender los derechos de la infancia en Ucrania, tres años después del inicio de una guerra que sigue teniendo consecuencias devastadoras para las niñas y niños del país. El vicedecano, Óscar García, ha hecho entrega de la donación a Rocío Gutiérrez, coordinadora de UNICEF en Castilla y León, en un acto celebrado en la sede colegial.
A través de esta acción solidaria, ingenierosVA refuerza su colaboración con UNICEF, una organización que centra su labor en la defensa, estudio, sensibilización e implementación de políticas que garanticen que todos los niños y niñas puedan ejercer plenamente sus derechos. Las emergencias consecuencia de un conflicto armado dejan a la infancia en una situación de inmensa vulnerabilidad y apoyos como el de ingenierosVA permiten que UNICEF pueda llegar a más niños y niñas.
Para ingenierosVA es esencial apoyar a organizaciones como UNICEF en esta labor tan necesaria, demostrando que la ingeniería, además de un motor económico, es un agente de apoyo social comprometido con el bienestar de la comunidad. Una vez más, nos enorgullece colaborar en iniciativas que contribuyen a mejorar la vida de las personas.
El espíritu de responsabilidad social de ingenierosVA no solo se manifiesta en nuestro apoyo a la formación y el desarrollo profesional de nuestros colegiados. Nuestro compromiso se extiende al ámbito social, con el objetivo de contribuir a generar un impacto positivo en momentos de dificultad. Desde el Colegio queremos que nuestro colectivo tome conciencia sobre la importancia de la solidaridad y nos comprometemos a seguir apoyando iniciativas humanitarias que promuevan el bienestar de la sociedad.
UNICEF es una agencia especializada de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) cuya misión principal es promover y defender los derechos y el bienestar de todos los niños, niñas y adolescentes en todo el mundo. En Castilla y León se dedica a promover y defender los derechos de los niños a través de diversas iniciativas, a través de una estrecha colaboración con instituciones y comunidades locales.
La organización lleva más de 25 años en Ucrania, donde cuenta con un equipo de más de cien personas y una red de oficinas con plena capacidad operativa. En los últimos años ha estado volcada en la respuesta humanitaria a la crisis en el este del país, y ahora extiende su trabajo a toda Ucrania y a los países vecinos.